Desde algunos años el Reiki, como terapia de medicina
alternativa, ha experimentado un gran desarrollo en Occidente.
El Reiki es un sistema ancestral, de gran sencillez, para
curar transmitiendo energía por imposición de manos.
Reiki es un término japonés que alude a una "Energía Vital
Universal". Esta es la misma energía que ha sido conocida por distintas
culturas, recibiendo denominaciones como "Prana", en la India, o
"Chi" en la China, y que también algunos científicos han denominado
"Bioenergía" o "Bioplasma".
Terapia de Reiki
El terapeuta de Reiki coloca las manos en distintas partes del cuerpo del paciente, específicamente en el lugar de sus centros energéticos, llamados chacras por los hindúes.
Los chacras son vórtices de energía rotatoria, que presentan distintas funciones y están ubicados en diversos puntos de los llamados "cuerpos sutiles".
Podemos imaginar estos cuerpos sutiles, como duplicados energéticos del cuerpo físico, y que residen en dimensiones de espacio-tiempo paralelas a la dimensión física que normalmente percibimos con nuestros limitados cinco sentidos sensoriales.
Por estar vibrando en distintas
frecuencias estos cuerpos sutiles no los podemos percibir pero sin embargo
están asociados con aspectos del área emocional, mental y espiritual de las
personas.
Para el Reiki todas las
enfermedades constituyen desequilibrios y bloqueos en el correcto flujo de la
energía, a través de una red de canales ubicados en estos cuerpos sutiles.
Al traspasar energía del terapeuta al
enfermo, el aura o campo bioenergético de éste se limpia y se equilibra,
permitiendo que pueda actuar su poder natural de auto curación.
En una sesión de Reiki son muy
variadas las sensaciones que puede experimentar el paciente. Algunos podrán
percibir una sensación de calor, hormigueo, cosquilleo o vértigo.
Otros sentirán alivio de dolores, o se
relajarán profundamente hasta dormirse en horas desusadas.
Algunos más con el Reiki pueden
atravesar una fase de desahogo de emociones reprimidas, las cuales pueden ser
el origen de sus dolencias psicosomáticas.
Es posible que el paciente llore o
exprese su ira, o que empiece a hablar extensamente de lo que le ocurre. Todas
estas manifestaciones representan liberaciones catárticas muy beneficiosas para
el paciente.
La esencia del Reiki es el
amor, y las sesiones constituyen una experiencia por la cual se establece un
contacto con la Energía Divina que se hace fácilmente perceptible.
El terapeuta de Reiki debe
estar consciente que la curación procede siempre de planos superiores, y es un
poder restituyente que no posee, sino que se permite que se manifieste a través
de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario